
Según este artículo (en catalán) el consumo de fármacos para este supuesto trastorno se ha multiplicado por treinta en una década. Cada vez son más los psiquiatras, neurólogos, psicólogos y diversos expertos en salud y educación que insisten en que este trastorno es una invención detrás de la cual existe una potente industria farmacéutica interesada en que se medique a los niños y niñas.
Las medicaciones no curan, simplemente «calman», «apaciguan», «atontan» o «drogan», pero no curan.
Los problemas de atención, hiperactividad y de conducta en general son la forma en la que niños y niñas expresan su malestar interno. Intervenciones terapéuticas como el arteterapia son de gran ayuda. Y sin duda el sistema educativo debería ser capaz de responder a las necesidades de niños y niñas a l@s que cada vez les cuesta más ajustarse a unas formas de enseñanza-aprendizaje que no los tiene en cuenta.
http://www.elcritic.cat/investigacio/el-tdah-el-laboratori-de-la-infancia-2902